viernes, 20 de enero de 2023

TRINXAT DE LA CERDANYA

Cuando llega el frío apetece comer sopitas calentitas, pero también es la temporada de las coles, las alcachofas y otros productos que ayudan a combatir los fríos. 

Hoy traigo una receta sumamente sencilla y rica que tiene su origen en la zona de la Cerdanya, en Cataluña, donde las temperaturas suelen ser sumamente bajas y la alimentación suele estar acorde con ellas.

Hay varias versiones, porque hay quien le pone butifarra, pero la receta original solamente lleva panceta frita crujiente. 

2 Patatas
1 coliflor 
2 lonchas de panceta o tocino 
AOVE
sal 
Pimentón de La Vera dulce o picante (este ingrediente no figura, pero yo se lo he puesto)

Pelamos y cortamos las patatas y las ponemos a hervir. Cortamos la coliflor en juliana fina y la ponemos también a hervir junto con las patatas, pero cuando lleven más o menos diez minutos cociendo. Una vez que esté todo blandito, lo sacamos y lo machacamos con un tenedor. No debe quedar un puré muy fino, sino que se han de notar los trozos (El nombre de trinxat le viene de aquí).

Cortamos la panceta por la mitad y en tiras finas. Las freímos con un poco de AOVE hasta que quede crujiente. 

Mezclamos los trozos de panceta con la pasta de coliflor y patata y en teoría ya tenemos elaborada nuestra receta. Sin embargo, es un hecho evidente que si salteamos la mezcla en aceite de freír la panceta, quedará más calentita y le aportará su sabor. Y si espolvoreamos el pimentón mientras salteamos, le aportará mejor sabor.

Como se puede ver, es una receta de primero de infantil y apta para los más brutos del lugar, pero aporta calor y está realmente rico.




jueves, 5 de enero de 2023

HUEVOS RELLENOS DE SALMÓN AHUMADO

En más de una ocasión he hablado de la perfección del huevo. Su forma invita a los artistas a copiarla, su tamaño es también perfecto pues cabe en la mano y sirve como arma arrojadiza ideal y en la cocina es probablemente el producto más versátil que se pueda imaginar.

La receta que vamos a revisar hoy es una buena muestra de ello pues vamos a utilizar el huevo en dos vertientes bien diferentes. Por una parte lo coceremos para poder rellenarlo y por otra haremos una salsa mahonesa para napar.

Cocer un huevo requiere seguir unos tiempos, puesto que si queremos unos huevos cocidos perfectos debemos poner agua a calentar hasta que cueza, en ese momento metemos los huevos con sumo cuidado para no romperlos y esperar exactamente 10 minutos ya que si nos pasamos de este tiempo nos van a quedar reverdecidos y con mala presencia, pero si nos quedamos cortos, lo que vamos a conseguir es que las yemas no se cuajen y queden cremosas, y esto no nos interesa para hacerlos rellenos. Es importante sacar los huevos un rato antes de la nevera para que no estén fríos y el contraste con el agua hirviendo los rompa. Hay quien pone en el agua un chorro de vinagre y un puñado de sal para que frenen la salida de la clara en caso de rotura, pero si hacemos las cosas bien no es necesario.

El relleno puede ser multivariado, ya que podemos rellenarlos de atún mezclado con mahonesa, con carne picada y salsa de tomate, para lo cual el napado va resultar mucho más interesante hacerlo con besamel y gratinarlos con queso rallado, o como la receta que vamos a elaborar hoy.

Vamos a necesitar huevos (uno y medio por comensal) una cebolla, tomate tamizado, pimentón de La Vera dulce y unas lonchitas de salmón ahumado. Para la salsa mahonesa usaremos un huevo, una pizca de sal, una pizca de azúcar, un chorrito de vinagre al gusto y aceite de girasol.

Mientras cocemos los huevos, comenzaremos haciendo el relleno para lo cual pelamos y picamos la cebolla muy fina, la ponemos en una sartén con un chorrito de aceite a fuego medio-bajo con una pizca de sal hasta que quede trasparente. En ese momento añadimos una cucharadita de pimentón ahumado de La Vera, removemos bien y echamos el tomate dejando que se fría bien. 

Una vez que tenemos el sofrito atemperado, desmenuzamos las lonchas de salmón y las añadimos removiendo bien para que queden incorporadas. 

Vamos a por los huevos. Una vez que estén cocidos y atemperados, los pelamos y los partimos por la mitad. Ponemos las yemas junto con el resto del relleno y las machacamos con ayuda de un tenedor hasta que queden bien incorporadas. Luego, con una cuchara vamos rellenando las claras procurando que quede una montañita en el centro. 

En cuanto a la mahonesa, ponemos un huevo entero en el vaso batidor, con una pizca de sal y otra de azúcar. Un chorrito de vinagre y una cantidad generosa de aceite. Metemos la batidora hasta el fondo del vaso y la conectamos a potencia máxima. Cuando veamos que el huevo está empezando a tomar cuerpo, vamos levantando y bajando la batidora hasta conseguir la textura deseada.

Napamos los huevos y ya tenemos nuestra receta lista para servir. 


Hemos decorado cou unas huevas de salmón.