Quién
me iba a decir a mí, que a estas alturas de la película iba a elaborar un plato
de arroz de marisco y pescado y que se iba a llamar “Paella de Cullera”.
La
genialidad se la debemos a un restaurador de la localidad, que regenta un restaurante
en L´Estany con más de sesenta años de historia a sus espaldas. Hablamos de D.
Salvador Gascón y su restaurante Casa Salvador.
Resulta
que, no conforme con crear la receta y entregarla generosamente para que pueda
ser elaborada por todos los restaurantes de Cullera, ha conseguido que el
ayuntamiento se haga cargo de convocar anualmente un concurso nacional cuyo
único cometido es elaborar el plato. Ya va por tercer año consecutivo.
La
receta en sí parece muy sencilla, pero cuando te pones a hacerla te das cuenta de
que tiene más complicación de la que te cuentan.
Los
ingredientes son:
Caldo de pescado de roca
de la Bahía de Cullera
Langostinos de la lonja
de Cullera (2 por comensal)
Sepionet, también de
Cullera sin su tinta, pero con su melsa
Salmonetes (no especifica,
pero entendemos que han de ser de roca y, naturalmente de Cullera)
Figatells de escorpa de
la lonja de Cullera
Arroz de la variedad J.
Sendra
Aceite de oliva virgen
extra
Tomate fresco de la
huerta de Cullera para sofreír
½ cebolla
1 diente de ajo
Pimentón dulce
Azafrán
Sal
En realidad, lo realmente
complicado es encontrar algún ingrediente y por supuesto el mise en place.
Lo primero que haremos
será el fumé poniendo una buena cantidad de morralla y las espinas de la escorpa
y dejaremos cocer hasta conseguir un caldo muy consistente.
A continuación, pondremos
una paella sobre el fuego medio y freiremos los langostinos durante unos tres
minutos, y los reservamos. Hacemos lo mismo con los sepionets, que son sepias
pequeñas a las que hay que retirarles la tinta, pero no la melsa, que es el
bazo del animalito y que se aprecia porque es una especie de bolsa que contiene
un líquido marrón espeso. También reservamos después de haberlos frito unos
tres minutos.
Picamos bien el ajo, la
cebolla y el tomate y lo añadimos al aceite. Yo este paso lo voy a dar a mi
manera, que es echar el ajo, después la cebolla y cuando esté pochada le pongo
el pimentón y acto seguido el tomate para cortar la cocción y que no amargue.
Echamos el arroz y dejamos
sofreír removiendo bien durante otros tres minutos para que se perle.
Añadimos el caldo y
dejamos que cueza durante unos 14 minutos, pasados los cuales bajaremos la
intensidad del fuego hasta que seque por completo.
Ahora es el momento de
añadir los lomos de los salmonetes perfectamente desespinados, los langostinos,
los sepionets y los figatells de escorpa. Y ya tendríamos elaborada nuestra
Paella de Cullera.
Vamos con las
complicaciones añadidas. En primer lugar, hay que elaborar los figatells, que
son una especie de embutido en las que la carne es la de la escorpa. La
cubierta es lo que se conoce como mantellina, que es la parte interior del
estómago del cerdo. Parece evidente que en Cullera debería haber mantellina en
todos los rincones, pero no. Es complicadísimo encontrarla. No es difícil
encontrar los figatells ya elaborados, pero son de cerdo, por lo que podemos
sustituir la carne de su interior por la de la escorpa. Yo me presenté ante el
autor de la receta y le pregunté de dónde la sacaba él, y muy amablemente me
reconoció que no era fácil y se ofreció a conseguirme medio kilo de mantellina,
que hube de ir a recoger en el restaurante.
La segunda complicación
es desespinar por completo la escorpa. En el caso de los salmonetes tampoco es
que sea coser y cantar, pero las espinas son más fáciles de localizar y de
extraer con ayuda de unas pinzas. La cosa es que como la escorpa va desmenuzada
para poder rellenar la mantellina, aunque destrocemos la carne, no pasa nada.
Se trata, como vemos de
un ejercicio de paciencia, creatividad y como en todos los platos de arroz y
paella, degustarla en buena compañía es fundamental, por lo que también estamos
fomentando la socilización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario