Esta
entrada va dedicada a los que dicen que no saben cocinar, que son unos patosos,
que eso de la cocina es para otros, que, en definitiva, son un poco gandules, pero
que, en el fondo, les encantaría hacer un buen plato para quedar bien y no
saben cómo.
Lo
primero que te aconsejo, amable lector, es que dejes a un lado los prejuicios
de los precios, porque para esta receta vas a necesitar gastar dinero en lo que
menos te lo piensas: les fabes.
Ayer
compré unes fabes que me costaron 20 euros el Kg. Sí, lo que lees, pero luego
el compango salió más baratito, porque entre el chorizo, la morcilla, la
panceta y el lacón, no llegó a los diez euros.
Bueno,
vamos a la receta. Los ingredientes ya están casi apuntados, y la ejecución es,
más o menos como la de los judiones de la abuela que ya apareció en alguna
entrada anterior, pero en mucho menos tiempo.
300 gr de fabes asturianas
1 chorizo asturiano
1 morcilla asturiana
150 gr. De lacón
150 gr de panceta
Pimentón de La Vera
ahumado dulce
1 hoja de laurel
3 dientes de ajo
Unas hebras de azafrán de
Castilla La Mancha
AOVE
Sal
Ponemos les fabes a
remojo la noche anterior y tal cual, las echamos en una olla junto con el
chorizo, la morcilla, el lacón, la panceta, la hoja de laurel y los dientes de
ajo enteros. Añadimos un chorrito de aceite de oliva virgen extra y, los más
trabajadores, si quieren, pueden poner un poquito de cebolla picada, pero como
yo no tenía, pues no la he puesto. Lo ponemos a fuego fuerte hasta que
comiencen a hervir y luego las bajamos a fuego mínimo. De vez en cuando le
echamos una ojeada para quitar la espuma, que eso es la grasa.
Y ya está. Sólo hay que
esperar a que estén tiernas, que serán unos 45 minutos, si les fabes son de estas
caras, si no, un poco más.
Ahora viene el toque
maestro, que es poner las hebras de azafrán, y el no va más, ponemos una
cucharada de pimentón en una sartén con aceite y cuando coja el colorcito rojo
carmín, lo añadimos al puchero.
Donde quiera que presentes
esta receta, vas a triunfar y tu autoestima se va a elevar hasta tocar el
cielo.