domingo, 3 de marzo de 2019

CODILLO DE CERDO AL HORNO


Si pensamos en elaborar un menú infantil, siempre empezamos por unos macarrones o espaguetis con tomate y embutido, unas albóndigas, hamburguesa… o en otro caso, una pizza. Sin embargo, pocas recetas hay que sean tan del agrado de los niños como esta de codillo al horno, que además de fácil de elaborar, puede completarse con una sopa de fideos como primer plato. En realidad, no hace falta ser tan niño para que te guste la receta, porque en mi caso, bueno, no es que me guste, es que a veces sueño con ella.

1 codillo de cerdo para cada dos personas, en función del tamaño.
2 patatas grandes
1 cebolla
1 tomate.
1 ramita de romero
Aceite ligero para freír
Sal

El codillo se puede comprar en crudo o pre-cocido. Si lo compramos pre-cocido, podemos obviar el primer paso, que sería escaldarlo para quitar toda la suciedad que pueda tener. A continuación, ponemos agua en una olla, añadimos el codillo y dejamos cocer durante una hora y media a dos horas aproximadamente, hasta que quede blando.

Vamos a por la guarnición, que van a ser unas patatas a lo pobre. Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de unos 5 mm. Pelamos la cebolla y la cortamos en juliana de un tamaño similar y por último cortamos el tomate también rodajas y luego en medias rodajas.

Ponemos a calentar aceite suave (puede valer de girasol) a fuego mínimo y echamos las patatas, la cebolla y el tomate, tapamos la sartén y dejamos que se cuezan durante unos 30 minutos.

Toda esta elaboración la podemos dejar hecha incluso desde el día anterior porque es lo que más tiempo lleva, aunque como se puede comprobar, no ofrece ninguna dificultad.

Cuando vayamos a comer, ponemos el codillo con la parte de la piel hacia arriba y rodeamos con las patatas. Ni siquiera hace falta pre-calentar el horno, porque ya está todo cocinado, es decir que lo metemos en la posición grill y aire para que se caliente y se doren tanto las patatas como la piel del codillo y… a comer. La ramita de romero no es en absoluto imprescindible, pero le aporta aroma.

El caldo que queda de cocer el codillo tiene un sabor exquisito, así que no hay que tirarlo. Yo, de hecho, voy a utilizarlo para hacer mañana arroz al horno, pero con unos fideos complementamos la receta del codillo a la perfección.   

    

No hay comentarios:

Publicar un comentario